Por Jesús Ramos
Lidiar con los errores internos de los proyectos políticos es harto complicado. Usualmente no se preparan los equipos para recibir candela del interior, creen que todo ataque o crisis será provocada por los oponentes, vendrá de afuera calculan.
No siempre es así, el Audi R8 de José Luis García Parra, “el Choco”, y la evidencia fotográfica de un outfit suyo de más de 600 mil pesos demuestra que la indiscreción e imprudencia son filos mortales en la política.
Ya renunció a la coordinación de asesores de la mesa directiva del Senado, no lo es más, sin embargo, sería complejo aceptar su separación absoluta del proyecto armentista, José Luis tiene pinta de insustituible en su esquema.
Es él la persona más cercana a Armenta, el capitán que conduce su navío hacia la gubernatura de Puebla, el amigo que deseamos tener, su brazo derecho, el centro de poder de su proyecto.
Mostrar en redes sociales su opulencia con un coche que jamás la clase baja ni media podrá conducir, equiparado a dos casas y cuatro departamentos, le sitúa en el paralelo de los millonarios, lo que no es criticable si sus ingresos están alejados de la política.
Subir contenidos insensatos a redes sociales que pueden ser percutidos por los adversarios para lastimar al oponente, lo que se llama judo narrativo, por utilizar la fuerza contraria en beneficio propio, es totalmente válido en la guerra. Y fue lo que ocurrió con el Choco.
No fue culpa de Alejandro ni equivocación suya, lo fue de un integrante de su proyecto, el más importante entre quienes le acompañan, pero no de él, cada ser acierta y erra, y responde por lo suyo.
Restarle puntos en las encuestas no es creíble ni le hará más fuerte como algunos románticos podrían argumentar con la frase empolvada aquella de que lo que no mata fortalece, tampoco le destrozará o le mermará preferencias, entendiendo él mismo el tamaño de la tontera.
Políticos como Alejandro tienen una base social y política sólida por los años caminados. Quién le respalda no le abandonará por escándalos como el aquí comentado, le saben puntero, apostaron ya y nada les hará cambiar de opinión.
Es distinto el ejemplo de Julio Huerta, nomás imagínelo en el sótano de las preferencias y con un escándalo a cuestas, porristas suyos emigrarían corriendo a opciones distintas con mejores posibilidades.
DiarioReporter
Jesús Ramos
Ciudad de Puebla
Sábado 05 de agosto de 2023.
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